Dolor o escozor al orinar después de haber mantenido relaciones sexuales. ¿Lo has sentido en alguna ocasión? Si es así, es muy probable que la cistitis post-coital haya hecho acto de presencia en tu vida. Y es que, tal y como explican los expertos, esos son dos de los principales síntomas que nos alertan de que podemos estar sufriendo esta patología.
Ahora bien, ¿Cómo produce? ¿Se puede evitar? ¿Tiene tratamiento? La respuesta a esta y otras cuestiones acerca de la cistitis post-coital la encontrarás en este post. Te aclaramos breve y sencillamente todas tus dudas.
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Las mujeres jóvenes son las más afectadas por la cistitis post coital
Antes de entrar en faena, nos gustaría aportar algunos datos para contextualizar esta infección que afecta a tantas mujeres. Según datos del Centro de Información de la Cistitis, una de cada tres mujeres afirma haber sufrido cistitis después de mantener relaciones sexuales, sobre todo entre los 20 y 30 años, al ser más activas sexualmente. Los síntomas se revelan entre las 24 y las 48 horas después del coito.
¿Cómo se produce la cistitis después del sexo?
Si hay que buscar un culpable, sin duda, tenemos que señalar a la bacteria Escherichia Coli. Esta se encuentra en el colon y alrededor de la uretra. Durante el acto sexual es más fácil que esta bacteria afecte al conducto urinario.
Además, no debemos obviar lo cerca que está el recto, por lo que es posible que la bacteria llegue a la uretra y a la vejiga.
Por otro lado, el uso de preservativos afecta a la mucosa de la vagina, pudiendo modificar la acidez o el pH favoreciendo así el desarrollo de bacterias. El resto de los anticonceptivos también pueden alterar la mucosa y la sequedad, sobre todo los anticonceptivos que supongan la introducción de algún elemento en la vagina, como por ejemplo el anillo vaginal, pues también pueden arrastrar las bacterias hacia el interior.
El uso de juguetes sexuales puede inducir a la infección de orina después del sexo, ya que pueden ser grandes fuentes de acumulación de bacterias, sobre todo si se comparten. De ahí, nuestra insistencia en la importancia de limpiar correctamente los juguetes sexuales después de cada uso. Puedes hacerlo con agua y jabón neutro, o bien con un producto específico para la limpieza de juguetes sexuales.
Por último, durante la menopausia o el embarazo, las alteraciones hormonales favorecen la proliferación de infecciones en el tracto urinario. Además, durante la menopausia, la sequedad vaginal es uno de los principales síntomas.
¡Cuidado con el sexo anal!
En el caso de que practiques sexo anal y después decidas mantener relaciones vaginales, la contaminación por esta bacteria es prácticamente inevitable.
En cualquier caso, además de la presencia de la Escherichia Coli, los expertos señalan otros motivos que pueden propiciar la cistitis, como la falta de lubricación. Recuerda que el ano no lubrica de forma natural, así que, es fundamental que te apliques un buen lubricante anal. De lo contrario, no sería extraño que tengas molestias e irritaciones durante la penetración, las cuales se traducirán en pequeñas heridas que favorecerán el desarrollo de la infección por esta bacteria. A partir de ahí, los síntomas de la cistitis post-coital no tardarán en aparecer.
¿Cuáles son los síntomas de la cistitis post-coital?
Los síntomas de la cistitis post-coital surgen después de unas horas de mantener relaciones sexuales, entre 24 y 48 horas. La manera de resolver esto es tomando antibióticos recetados por el médico.
- El primer síntoma característico de la cistitis post-coital, que explica la Clínica Universidad de Navarra (CUN) es el dolor o el escozor al orinar. Una sensación que se hace más intensa cuando se está acabando de orinar. Además, cuando se termina, la sensación de tener ganas de ir al baño continúa, aunque la vejiga ya esté vacía.
- Otro síntoma suele ser una presión en la parte baja del abdomen que está combinada con lo anterior. Además, es normal que la orina esté más turbia (un color amarillo oscuro) y que se sienta un malestar en la zona pélvica.
- Por último, otra señal de esta infección es la aparición de sangre en la orina. Esto no ocurre en todos los casos y, en caso de que suceda, te aconsejamos que acudas inmediatamente al médico.
¿Se puede evitar la cistitis post-coital?
La respuesta es sí. La Asociación Española de Urología (AEU) señala estos tres consejos que ayudarían a reducir la posibilidad de contraer la infección. Y es que, aunque no se puede garantizar la inmunidad, por supuesto, sí se minimiza el riesgo.
- Orinar con frecuencia.
- Realizar una micción poscoital.
- Mantener unos buenos hábitos higiénicos, como lavarse tras realizar el sexo anal, especialmente, si se va a practicar después sexo vaginal. La asociación aconseja limpiarse de delante hacia atrás.
Si la cistitis post-coital es frecuente o incluso se podía decir que permanente, es decir, que aparece siempre que mantienes relaciones sexuales, la AEU recomienda un tratamiento antibiótico.