Darle placer al órgano genital de tu pareja masculina es uno de los regalos más preciados que puedes hacerle en el terreno del sexo. Claro que la penetración en sí tiene su atractivo y es quizás el summum en un encuentro erótico, pero valerte de las técnicas más avanzadas para estimular el miembro puede ser también una maravilla. Para que tengas todo el conocimiento necesario, en esta entrada de Tocabananas te explicaremos cómo hacer los mejores masajes para penes.
No tienes por qué quedarte o conformarte con lo que hace todo el mundo. Si te vales de la imaginación y de nuestros consejos, podrás realizar masajes para penes de las formas más originales, excitantes y estimulantes.
La palabra “masaje” siempre es sinónimo de relax, pero si además lo realizas en esa zona 100% erógena, podrás llevar a tu pareja a sensaciones pocas veces experimentadas… ¡lograrás que pase de la apacible relajación a una verdadera explosión de placer!
Tabla de contenidos
Cómo debes realizar los preparativos para dar el mejor masaje
Siempre que vayas a tener un encuentro sexual, o tan sólo si se trata de una masturbación, lo más recomendable es que se cuiden los aspectos que rodean a la acción del masaje en sí. Todos los detalles cuentan, e indudablemente van a sumar para que pueda establecerse el ambiente más propicio, aquel que más logre estimular el placer de los participantes en el masaje. ¿Te imaginas cómo puede realzarse todo si utilizas unas velas eróticas? ¿Y qué tal una barrita de incienso?
Antes de empezar a probar con las diferentes técnicas relacionadas con los masajes para penes, nuestro consejo es que tengas en cuenta la lubricación. Contamos con una amplia gama de productos que te serán idóneos para este fin. Y la clave para que los lubricantes sexuales sean tus mejores aliados, es que no escatimes con la cantidad de producto: piensa que cuanto más fluidamente se deslicen las manos sobre el miembro, menos posibilidades habrá de fricción… ¡y el placer llegará a niveles muy altos!
Cuál es la forma de masajear más tradicionalmente al pene
Si hay un masaje de los que pueden definirse como básicos, es el que se realiza con mayor habitualidad. Y aunque sea el más común, también tiene el beneficio de ser realmente placentero. Se trata de rodear el pene con la mano e ir deslizándola hacia arriba y hacia abajo. Suma mucho si rotas la mano en la acción de la subida, ya que abarcarás una zona más grande con la caricia de tu palma y tus dedos.
Es aconsejable también que modifiques la intensidad de tus movimientos y que vayas variando también la velocidad… ¡te apostamos lo que sea a que no va a pedir que te detengas por un buen rato!
Un masaje perfecto con protagonismo de los pulgares
Aunque sólo utilices tus dos dedos pulgares para realizar el masaje, el resultado puede ser igualmente asombroso. En esta técnica, se trata de que el movimiento preponderante sea de abajo hacia arriba, y que cuando lo hagas tengas los pulgares bien extendidos.
Es clave que te valgas de la ayuda de las dos manos, y te centres en el glande del pene (allí tiene que estar la magia de tus dedos pulgares). Debes considerar que, siendo una zona bastante sensible, el glande debe ser estimulado con extrema delicadeza. Luego de llegar hasta arriba, regresa otra vez con tus manos a la base del pene, ¡y vuelta a empezar!
Las manos entrelazadas para el masaje más placentero
En este tipo de masaje, necesitas usar ambas manos y tenerlas entrelazadas.
Tienes que envolver al pene entre ellas, y realizar el clásico movimiento de ir hacia arriba y hacia abajo. El interior de tus palmas tiene que arropar al miembro de tu pareja… ¡imagina que se trata de un masajeador!
Hay una recomendación importante para esta técnica, y es que procures juntar las palmas y los nudillos, y a través de esta unión hagas una mayor o una menor presión según la zona en la que estés. Lo ideal es que la máxima presión la realices cuando te acercas al área del glande.
Poner todo el foco en el glande
Este último masaje que te aconsejamos, está centrado 100% en el glande. Con una de tus manos debes hacer los movimientos hacia arriba y hacia abajo, y con la otra… ¡allí está la clave de esta excitante técnica! Se trata de que vayas haciendo círculos alrededor de la cabeza del miembro, con la misión de envolver el glande con tu mano (las innumerables terminaciones nerviosas que hay en el glande hacen que la excitación suba varios tercios).
Recuerda la importancia de renovar el lubricante si notas que hace falta hacerlo. Sólo es cuestión de aplicar más producto y seguir…
¿Cuál de estos masajes le regalarás a tu pareja?