No tengas prisa… y sigue los consejos de los expertos. De este modo, no tardarás en practicar y disfrutar del sexo como antes. Todas las mujeres que han pasado por un embarazo conocen de primera mano la extraordinaria transformación que experimenta su cuerpo (… y su vida) en tan solo unos meses. Y es que, tanto sus órganos internos como su apariencia externa se transforman debido a la gestación del bebé que acaba de nacer. Todo cambia, incluida la vida sexual de la pareja.
El embarazo y la posterior llegada del bebé ponen el mundo de la pareja “patas arriba”, incluida la vida sexual. ¿Dónde se ha ido el deseo sexual? No os preocupéis, no ha desaparecido, solo está dormido. Es normal que durante unas semanas, las ganas de tocarse y de tener relaciones sexuales brillen por su ausencia. El cansancio, la falta de horas de sueño y las nuevas circunstancias en las que vivís desde que el bebé ha llegado a vuestro hogar son algunas de las razones, más que suficientes, para explicar este “bajón”.
Tabla de contenidos
Consejos para tener relaciones sexuales post parto
Si acabas de dar a luz y te sientes identificada con lo que hemos descrito unas líneas más arriba, te vendrá genial leer las recomendaciones que los Hospitales Nisa han recogido en una guía para retomar el sexo después del parto. Por supuesto, lo más aconsejable es que consultes a tu ginecólogo, ya que cada caso es diferente y será él o ella, la persona más indicada para asesorarte al respecto.
-
Espera un tiempo prudencial
Tanto si el parto es natural como si el bebé nace mediante una cesárea, los órganos de la mujer tardarán algún tiempo en volver a su estado anterior al embarazo. Las recomendaciones habituales aconsejan esperar seis semanas antes de retomar el sexo (aunque es mejor preguntar al ginecólogo).
Además de la recuperación física, la mental también es importante. De hecho, la madre puede necesitar más tiempo para estar preparada mentalmente, ya que la nueva situación puede provocar que la mujer no quiera tener contacto sexual con su pareja. En estas situaciones la guía recomienda comenzar con caricias y masajes para no precipitarse.
-
Ante todo, expresa lo que sientes
Ya se sabe que los cuidados del bebé apenas dejan tiempo para poder hacer otras cosas. Sin embargo, es fundamental que las madres no dejen de lado a la pareja y que dediquen tiempo para hablar con ella y disfrutar de cierta intimidad. Esos minutos pueden ser vitales para buscar apoyo, recargar energía y fortalecer la relación.
-
Acepta los cambios de tu cuerpo
Llevar en el vientre un bebé pasa factura a todo el cuerpo. Tanto los órganos internos, como la musculatura han sufrido cambios evidentes. Todo, poco a poco, volverá a su lugar. Ahora bien, no será inmediatamente, así que… ¡paciencia! De momento, lo importante, tal y como señalan desde los Hospitales Nisa, es no criticar la nueva imagen de la mujer y dan algunos consejos para sentirse mejor:
- Utilizar luz tenue en la intimidad.
- Comprar ropa bonita para los primeros meses de maternidad.
- Pedir ayuda para poder descansar.
- Tener presente que los cambios se deben a la nueva vida que ha creado la pareja.
-
Vacía el pecho
Si el pecho está lleno, la presión puede provocar dolor en la madre. Por este motivo los expertos recomiendan dar el pecho al bebé antes de la actividad sexual.
-
Toma precauciones
Aunque la mujer no haya tenido la primera menstruación después de dar a luz hay posibilidades de que vuelva a quedarse embarazada, por lo que es recomendable que la pareja conozca el riesgo y utilice algún método anticonceptivo para evitarlo.
-
No te crees grandes expectativas
Ahora toca ir poco a poco… Es muy probable que las primeras veces que volváis a tener relaciones sexuales, tengas dolor. Por esta razón, y para evitar frustraciones, es fundamental no esperar demasiado e ir paso a paso hasta que ambos os volváis a sentir cómodos.
-
Busca momentos de intimidad
A partir de ahora seréis tres. Eso significa que el bebé, durante un tiempo, y especialmente los primeros meses, estará prácticamente el 100% del tiempo con vosotros. Sin embargo, los expertos recuerdan que es importante buscar momentos de intimidad para vosotros y probar diferentes posturas que se adapten a los cambios del cuerpo de la madre.
Por otro lado, mantener el buen humor ayudará a la que la pareja disfrute más de estos momentos y esté relajada.
-
Aplícate un buen lubricante
Después del parto es probable que la zona genital femenina no lubrique igual debido al nivel de los estrógenos. Esta circunstancia será más visible si la mujer está dando el pecho.
Los especialistas recomiendan consultar al ginecólogo para que le ayude a determinar qué opción es la más adecuada para mejorar la lubricación.
-
Puede que tus orgasmos hayan cambiado
A raíz del parto, el orgasmo de la mujer o la forma en la que lo alcanzaba ha podido cambiar y lo que antes funcionaba, ahora no. Es recomendable tratar el tema con confianza con la pareja. Una vez más la comunicación es fundamental.