En general, cuando vas a darte placer a ti misma, te pones en una posición que te resulte cómoda. Y suele ser en horizontal. Pero no siempre las cosas se dan como tú esperas, ya que en ocasiones surgen imprevistos que te llenan de ansias de placer, y no puedes aguardar hasta el momento de estar acostada… En este artículo de Tocabananas, te daremos unos interesantes trucos para saber cómo masturbarse de pie.
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Consejos previos antes de masturbarse de pie
Hay algo que debes tener en cuenta: en algunas posturas que te recomendaremos para darle rienda suelta a la masturbación femenina, pero estando de pie, necesitarás de cierto equilibrio. Si no te sobra este preciado bien, tendrás que buscar un punto de apoyo. Puede ser suficiente con que apoyes la espalda contra la pared.
Otro punto que suma mucho es buscar la compañía de un espejo. Sí, si te pones de frente a uno, tendrás el reflejo de tu imagen… ¡verte excitada, probablemente te excite aún más!
Además, verte frente a un espejo con una actitud sexual es uno de los caminos que puede lograr que suba tu autoestima en caso de que esté un poco baja. No dejes de observarte a ti misma, es una forma de conocer mejor tu cuerpo, y evidentemente aceptarlo tal como es.
La siguiente recomendación tiene que ver con la higiene. En caso de que te importe mucho que no se manche nada, en caso de que tengas la regla o pienses hacer squirt, nunca viene mal poner una toalla por debajo.
Y atención a este consejo: en caso de que sientas que lo que estás por hacer será de características apoteósicas, ¿qué tal grabarlo en vídeo y después enviárselo a tu pareja? Si él te envía habitualmente sus dick pics, puedes ser recíproca con unas imágenes calientes en donde te vea masturbándote…
Otra gran ventaja de masturbarte de pie, es la libertad de movimientos que te proporciona. Puedes incluso colocarte algo entre las piernas, como un cojín… ¡aunque sería mucho mejor algún tipo de juguete sexual como un succionador de clítoris!
Apoyándote en una mesa
Como tenemos anticipado en los consejos, para que no pierdas el equilibrio, la mejor técnica es que busques un punto de apoyo. Y nada mejor que una mesa o incluso una encimera. La ventaja, es que además puedes apoyar tu culo de manera parcial en esas superficies, y de esa forma dejar caer el peso y concentrarte solamente en disfrutar.
Un valor añadido, es que si te pones en una mesa y de espaldas a la pared, puedes aprovechar para utilizar un dildo con ventosa… ¡genial para estimular la zona G!
Masturbarte con una pierna levantada
Es una posición para masturbarte de pie absolutamente cómoda, ya que tendrás libre acceso tanto la vulva como al clítoris.
Tienes que estar junto a la cama, o junto a cualquier otra superficie que tenga la altura suficiente como para que pongas un pie allí.
Según tu nivel de flexibilidad, puedes ir probando con distintas alturas. Y un gran sitio podría ser en el baño y frente al espejo… ¡podrás ver incluso cómo va cambiando tu vulva como respuesta sexual ante la estimulación que le das!
Qué mejor que masturbarse en la ducha
Es probable que esta sea una de las únicas experiencias que hayas probado en cuanto a masturbación de pie. Tocarse en la ducha es una idea genial, aunque debes tener en cuenta algo fundamental: ¡no resbalarte!
En caso de que decidas usar lubricante, te recomendamos que sea a base de silicón. Otro punto importante es jugar con el agua en la vulva (pero que no sea en la vagina), alternando la presión y la temperatura del chorro que dejas caer sobre tus genitales.
En la cama, pero sin tumbarse en ella
En esta postura, debes ponerte de pie en la cama teniendo la espalda apoyada en la pared y las rodillas flexionadas. Lo bueno de esta posición, es que puedes aprovechar al máximo la elasticidad del colchón, y así potenciar cada uno de los movimientos que realices.
Para conseguir un resultado superior, puedes añadir algún tipo de gel estimulante… ¡prueba con alguno que te proporcione un efecto calor!
Para valientes: masturbarse en suspensión
Se trata evidentemente de un nivel más, solo si eres muy atrevida. Vas a necesitar un agarre desde el cual tendrás que sostener tu peso con una mano sobre la cabeza. Y con la mano que te quede libre, podrás tocarte tus genitales, o los pechos… o lo que a ti se te ocurra (¿alguna vez has experimentado con la masturbación anal? Siempre hay una primera vez).
Ya te hemos dado hasta 5 formas distintas de masturbarse de pie. Seguramente hay más, y puedes ir probándolas una a una. La imaginación al poder… ¡y al sexo!