Manos lubricadas, movimientos suaves, firmes y repetitivos y caricias que tocan ciertas zonas de los genitales masculinos, son parte de los consejos básicos para masturbar a un hombre o una persona con pene y hacerle llegar al orgasmo recorriendo un camino de sensaciones únicas y placeres súper excitantes.
En ese post queremos darte algunas ideas para que la próxima masturbación que le hagas a tu pareja acabe en fuegos artificiales. Y es que, masturbarse a uno mismo es sencillo. De hecho, los españoles, tenemos bastante práctica en este asunto y se nos puede considerar expertos en el tema. Al menos, es lo que cabría pensar si atendemos a las cifras de un estudio realizado por la prestigiosa firma de juguetes sexuales, Tenga, donde se concluye que el 93% de los españoles afirma haberse masturbado alguna vez, lo que nos sitúa a la cabeza del ranking mundial.
Ahora bien, cuando se trata de masturbar al otro, y más concretamente, a una persona con pene, ¿sabemos cuáles son las técnicas más placenteras y eficaces? ¿Sabes cómo hacer que dure más una erección? A continuación, hemos incluido algunas de ellas. ¡Toma nota!
Tabla de contenidos
Lubrícate las manos
Segundos antes de comenzar es fundamental que te lubriques bien las manos. Esto hará que se deslicen como mucha más facilidad a lo largo de su pene y que las sensaciones sean mucho más placenteras para él. En Tocabananas contamos con una extensa y variada oferta de lubricantes de todo tipo, con efecto calor, de sabores, afrodisíacos…
Tanto si usas lubricantes, cremas o geles, es fundamental que antes leas las instrucciones del fabricante y sigas sus consejos en cuanto a la cantidad a utilizar y el modo en que se ha de aplicar.
No te olvides de los testículos
Una parte esencial de la masturbación es la que concierne a los testículos. Esta parte de la anatomía masculina requiere que le prestes mucha atención. Siempre que los acaricies sería conveniente que confirmaras con él si le gusta la presión y la intensidad con que lo haces o si prefiere que lo hagas de otra manera. De este modo, sabrás que estás yendo por el camino correcto hacia el orgasmo.
Ahora le toca al glande
A continuación, te proponemos que sujetes con una mano la base del pene y que hagas movimientos suaves sobre el glande. No hay una norma escrita para esto, la idea es que juegues con su pene dejándote llevar por la intuición, su cara, sus gestos y sus gemidos. Todo su cuerpo te irá dando señales para orientarte acerca de si lo que estás haciendo le gusta mucho o muchísimo.
Recuerda que siempre puedes ir añadiendo lubricante si crees que es necesario o simplemente para experimentar nuevas sensaciones.
Manos arriba y abajo
Llega el momento de deslizar las manos por el tronco del pene desde la punta a la base. La forma, ritmo y la velocidad con que lo hagas lo dejamos a tu imaginación y a la improvisación. Sigue el ritmo que creas oportuno y rómpelo de vez en cuanto, así le sorprenderás y aumentará su excitación, que es de lo que se trata.
Puedes aumentar la velocidad, alterar la presión de los dedos a lo largo del pene, y por supuesto, puedes añadir también sexo oral. Llegados a este punto, es importante dejarte guiar por sus expresiones de placer. Seguirlas es como interpretar las señales para alargar el placer y llegar al orgasmo.
Aunque existen infinitas clases de pene en función de su forma, lo cierto es que todos los consejos y comentarios que hemos incluido en este post son perfectamente aplicables a todos ellos. No importa si son grandes, pequeños, medios, si tienen forma de lápiz o más bien parecen un champiñón.
… Y llegó el orgasmo
Justo antes de que vaya a eyacular, frota la cabeza de su pene con una mano con suaves movimientos circulares. Puedes usar la otra mano para sujetar la base del pene. Puedes intensificar el momento de placer con la introducción de algún juguete sexual como por ejemplo un plug anal. Así, si él está de acuerdo, al mismo tiempo que está disfrutando de la masturbación manual, es posible sumarle los efectos de la estimulación anal con el plug.
En el sexo anal es imprescindible el uso de lubricante, ya que, la zona del ano no lubrica de forma natural. En cuanto al tipo de lubricante, recuerda que si vas a utilizar un juguete sexual debes aplicar un lubricante a base de agua, ya que los lubricantes de silicona no son compatibles con el material del que están hechos los juguetes.
También puedes usar un consolador o dildo, preferentemente si tiene un tope en el extremo como el que incluyen los plug. Si, además, los juguetes que elijas incluyen la función de vibración, el placer que sentirá tu pareja puede llegar a cotas insospechadas.